La presencia de una vaguada en la alta atmósfera y la aproximación de una onda tropical localizada sobre Puerto Rico llevarán nuevas precipitaciones al territorio nacional, incluidas algunas de las zonas más afectadas por los efectos de los huracanes Irma y María, en el este y noreste del país, donde los suelos están saturados de agua y aún hay comunidades inundadas.
La Oficina Nacional de Meteorología dominicana (Onamet) anunció en su último boletín que la actividad lluviosa se prolongará durante la noche y los próximos días sobre las regiones norte, noroeste, suroeste y centro del país.
Así, el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) mantiene la alerta para la provincia de Montecristi (noreste), en especial Guayubín y Castañuelas, donde persisten las inundaciones a causa de la crecida de los ríos Yuna y Yaque del Norte, dos de los principales del país, y que se desbordaron tras el paso del huracán.
Además, extiende el nivel verde de advertencia a Hato Mayor, El Seibo (noreste) y La Altagracia, Samaná, San Pedro de Macorís y La Romana (este), sin descartar que en el transcurso del día otras provincias también puedan recibir alertas por la mismas causas, después de que la entidad ayer anunciara que no emitiría más boletines sobre los efectos del huracán María.
El paso del ciclón cuando se encontraba en categoría 2 cerca de la costa este y noreste de República Dominicana, dos semanas después de que el ciclón Irma afectara al país, obligó a desplazar a miles de personas de sus hogares y ocasionó importantes daños materiales.
Cientos de viviendas inundadas, afectadas o destruidas, y daños en infraestructuras por 3.000 millones de pesos (63 millones de dólares), según las primeras estimaciones oficiales, son el saldo del paso del ciclón, a lo que habrá que sumar las pérdidas del sector agrícola, que aún no se han cuantificado de forma global.
Los cultivos más afectados son los de arroz y banano, los de mayor presencia en las zonas afectadas, donde se estiman pérdidas cercanas al 90 % y al 100 %, según datos de Oxfam, mientras que los productores de bananos calculan que sus pérdidas en la línea noroeste ascienden a 1.000 millones de pesos (21 millones de dólares).
En cuanto a pérdidas personales, el huracán María dejó un muerto en el norte a causa del derrumbe del techo de una vivienda y otro en el este tras intentar cruzar una cañada desbordada, según fuentes de la de Defensa Civil.
Miembros de esa entidad también recuperaron los cuerpos de una pareja de origen haitiano que fueron arrastrados por el río Yaque del Norte, en Montecristi, pero el COE no incluye en sus estadísticas ninguna de estas muertes, por considerar que se trata de episodios indirectos. EFE